Descargar Audio

noble-vater033020151121Noble Vater

Reseña biográfica de Richard Baxter

Richard Baxter (1615-1691)
Notas sobre su vida y ministerio

Fuentes de información para estas notas

He recogido información de varios escritos. Muchos autores confiesan que mucha de su información procede de un libro autobiográfico (Reliquiae Baxterianae), pero no he tenido el tiempo de ojear (mucho menos leer) esa obra de 800 páginas. Gran parte de lo que sigue la he tomado del libro Meet the Puritans (MP) por Joel Beeke y Randall J Pedersen1; también la introducción de J I Packer (JP) que se encuentra en español en El Pastor Renovado (Banner of Truth, 2009) y el prefacio de ese mismo libro por William Brown, el cual publicó la edición del libro que fue traducido a español. Además, en la edición de El Reposo Eterno de los Santos de CLIE (sin fecha) traducida por David Vila, hay una Nota a Modo de Prefacio que ofrece unos puntos de valor. No sé quien escribió esa “Nota”, porque sólo aparecen las iniciales “BF” con la anotación “Kidderminster, 25 diciembre 1758”. También he leído las introducciones y prefacios de Tomo I de The Christian Directory (¿publicado por Sovereign Grace Publishers hacia los fines del siglo pasado?) que contienen información interesante e instructivo. Me gusta mucho un artículo breve (5 páginas) por Lynell Friesen (LF) publicado en IIIM Magazine, Volume 2, Number 27, July 3 to July 9, 2000 titulado The Work and Thought of Richard Baxter (disponible gratis en PDF)2.

Problemas con la teología de Baxter, o ¿por qué considerar su vida y escritos?

En la Introducción a El pastor renovado, J I Packer, con una serie de datos cronológicos/biográficos “en el estilo de Who’s Who (Quién es quién)”, presenta “a Richard Baxter, el pastor, evangelista y escritor más destacado en cuanto a asuntos prácticos y devocionales producido por el puritanismo.” (Escribió dos veces más que John Owen, según LF.)

Packer continúa: “Baxter era un gran hombre, lo suficientemente grande para tener grandes defectos y cometer grandes errores. Brillante diputado independiente, extremadamente culto, con una asombrosa capacidad para el análisis instantáneo, el debate y la argumentación, era capaz de darle mil vueltas a cualquiera en un debate, pero no siempre empleaba sus destacados dones de la mejor manera posible.” Y Packer da unos ejemplos de cómo buscó un camino intermedio entre varias teologías sobre varias doctrinas (por ejemplo, entre la reformada y arriana y romana en cuanto a la gracia).

De hecho, la palabra “baxterianismo” fue inventada y se usa todavía (en inglés) de una manera despectiva en referencia a las enseñanzas de ese hombre, como pueden verificar por una búsqueda en el internet. Hay artículos modernos escritos por algunos de nuestros hermanos bautistas reformados que señalan esos errores en la teología de Baxter (por ejemplo, Austin Walker, y otros).3

Packer también afirma que Baxter no supo “desenvolverse bien en la vida pública.” Añade, “Aunque siempre fue respetado por su vida piadosa y su destreza pastoral, y porque siempre buscaba la paz doctrinal y eclesiástica, su proceder combativo, tajante y pedagógico ante sus semejantes aseguraba de antemano el fracaso.”

También Meeting the Puritans (Conociendo a los puritanos) dice (en mi traducción “dinámica”), “Los escritos de Baxter son una mezcla teológica extraña. Fue de los pocos puritanos cuyas doctrinas de los decretos de Dios, de la expiación y de la justificación fueron cualquier cosa menos reformadas. Aunque en general su teología fue estructurada siguiendo el pensamiento reformado, frecuentemente favoreció el pensamiento arminiano. Desarrolló su propia idea de la redención universal, la cual ofendió a los calvinistas, pero también retuvo una forma de elección personal, la cual ofendió a los arminianos. Rechazó la reprobación. Fue influenciado grandemente por los seguidores de Moisés Amyraut e incorporó en su teología mucho del pensamiento de Amyraut, incluyendo un universalismo hipotético, que enseña que Cristo murió por todos los hombres en teoría, pero que su muerte solamente tiene un beneficio verdadero a los que creen. Baxter creía que la muerte de Cristo fue más bien una satisfacción a la ley que una muerte sustitutiva personal por los pecadores escogidos.”

Los autores de este mismo libro continúan, “La manera en la cual Baxter entendió la justificación ha sido llamada ‘neonomismo’ (en inglés “neonomianism”o sea, ‘nueva ley’); dijo que Dios ha hecho una nueva ley ofreciendo perdón a los arrepentidos transgresores de la ley antigua. La fe y el arrepentimiento – la nueva ley que tiene que ser obedecida – llegan a ser la justicia personal y salvadora del creyente, justicia salvadora que es sostenida por gracia que la preserva. Así que, la soteriología de Baxter sigue a Amyraut con la adición de la enseñanza arminiana de una ‘nueva ley’. Afortunadamente, estas doctrinas erróneas no aparecen mucho en los escritos devocionales de Baxter, que tienen como su fin el animar la santificación antes de enseñar la teología”.4

Hay que fijarse bien en esa última oración, y en lo que dice Packer, después de exponer la parte negativa de la vida de Baxter, “Sin embargo, como pastor, Baxter era incomparable”.

Es esa “faceta de su ser” la que explica nuestro interés en Baxter. Podemos aprender mucho de él.

Padres y educación elemental

El Richard Baxter quien ministró en Kidderminster en Inglaterra y escribió muchos libros conocidos como El reposo eterno de los santos (The Saints’ Everlasting Rest) y El pastor reformado (The Reformed Pastor) y El directorio cristiano (The Christian Directory, un libro no traducido al español), nació el 12 de noviembre de 1615 (la fecha comúnmente aceptada), en un pueblo de Shropshire llamado Rowton, el único hijo de sus padres Beatrice Adeney y Richard Baxter.

Su padre tuvo la mala costumbre de jugar, además de haber heredado unas deudas, y su madre tenía mala salud. Por eso, Baxter hijo, el sujeto de este estudio, vivió con sus abuelos maternos por los primeros 10 años de su vida. Después de la conversión de su padre mediante la lectura de las Escrituras a solas, Baxter volvió a la casa de sus padres y luego en su vida se dio cuenta de cómo Dios usó las conversaciones serias acerca de Dios y de la eternidad como el medio de sus primeras convicciones, y de ver con aprobación la necesidad de una vida santa.

Notemos bien la gran bondad de Dios en la salvación de su padre y cómo Dios usó eso para bien en la vida del hijo.

En esas circunstancias, la educación de Baxter fue bastante informal. Dijo que tuvo 4 maestros diferentes en 6 años, y los 4 eran ignorantes, (¿en un sentido espiritual? ndv) y 2 de ellos llevaron vidas inmorales. No obstante, tuvo una mente fértil, y leyó y estudió con deleite.

No obtuvo grados universitarios pero casi todos están de acuerdo que sabía más de la Biblia y de los escritos de otros que la mayoría de los que tuvieron el privilegio de estudiar en la universidad.

Conversión, otros estudios

Un tiempo extendido de enfermedad y la lectura de varios libros, especialmente las obras de William Perkins, fueron los medios que Dios usó para que Baxter resolviera que sería de Dios (como testificó: God “resolved me for Himself”).

Cuando cumplió 15 años de edad, fue tocado y conmovido profundamente por el libro The Bruised Reed (La caña cascada) de Richard Sibbes. Escribió: “Sibbes me abrió más del amor de Dios y me dio una comprensión viva del misterio de la redención y de cuán grande era mi deuda a Jesucristo.”

Después de eso, confesó que el libro Treatise of Faith (Tratado de la fe) por Ezekiel Culverwell le hizo mucho bien.

La educación de Baxter mejoró cuando pudo estudiar en una escuela de gramática en Wroxeter con la ayuda de un maestro llamado John Owen (pero no el conocido puritano). Allí había un ministro erudito, Francis Garbet, que le ayudó en mucho.

A la edad de 16, persuadido por Owen, en vez de ir a la universidad, recibió instrucción de un amigo de Owen, Richard Wickstead, capellán en Ludlow Castle (Castillo de Ludlow). Estuvo allí por 18 meses, pero parece que su tutor no tuvo mucho entusiasmo en la tutoría.

Después de eso, en 1633, fue a Londres, patrocinado por Sir Henry Herbert quien era “Master of the Revels”) (director de entretenimiento) en la corte del rey Carlos I. Durante su poco tiempo en esa ciudad, oyó a 2 ministros puritanos, Charles I. Joseph Symonds y Walter Craddock, ministros piadosos que despertaron en él unas simpatías hacia los no conformistas. Pero, sólo se quedó en Londres por 4 semanas. No le gustó la vida mundana de la corte y también quiso cuidar a su madre enferma.

Volvió a su casa en el 1634 y su madre murió en mayo de 1635.

Por los próximos 4 años, estudió por su cuenta. Estudió teología. En particular estudió la teología de los escolásticos, incluyendo Tomás de Aquino, Duns Scotus y Guillermo de Ockham.

Llamamiento al ministerio, y ministerio en Kidderminster

A la edad de 23 años, Baxter fue ordenado como diácono en la iglesia oficial, pensando que los “conformistas” (los que favorecieron que todos fueran parte de la Iglesia de Iglaterra, la Iglesia Anglicana) tuvieron mejores argumentos que los no conformistas. Por 9 meses sirvió como maestro de una escuela fundada en Dudley, un centro de “no conformismo”. En 1639 comenzó a servir como asistente del ministro en el pueblo de Bridgnorth, Shropshire. Allí, pudo apreciar más el “no conformismo” que había en el país.

En 1641 Baxter fue establecido como coadjutor de Kidderminster, Worchestershire. La población contenía muchos tejedores groseros y corruptos. Al principio muchos fueron ofendidos por su predicación fuerte y por su énfasis en una Santa Cena controlada y en la disciplina de la iglesia. Sin embargo, durante los 17 años que sirvió allí (1641-42 y 1647-61) vio mucho fruto. Predicó como “un hombre moribundo a hombres moribundos”. Por la bendición del Espíritu Santo hubo muchas conversiones. Su orar también fue intenso, como una persona testificó, “Su alma tomó alas hacia el cielo y arrebató las almas de otros con él”.

Interrupción a causa de la guerra civil.

Durante el tiempo cuando los ejércitos del parlamento (bajo Oliver Cromwell) pelearon contra los ejércitos del rey, Baxter apoyó y, a veces, acompañó los ejércitos del parlamento. Predicó delante de Cromwell, pero no estaba de acuerdo con la tolerancia de Cromwell hacia los separatistas (los que habían dejado la iglesia de Inglaterra para formar iglesias separadas, como los presbiterianos, congregacionalistas, bautistas y otros). Aunque Baxter no se conformaba a la Iglesia Anglicana en varias cosas, con todo quiso ser parte de una iglesia establecida sin separación. Vio como algunos líderes separatistas enseñaron el antinomismo, el cual se opone a una vida cristiana práctica.

En el 1647, debido a las enfermedades prolongadas, Baxter tuvo que dejar el ejército. Recuperó en el hogar del señor Thomas Rous y su señora. Allí preparó la primera parte de su famoso libro The Saints Everlasting Rest (El reposo eterno de los santos), que fue publicado por primera vez en 1650. Más tarde en su vida declaró que lo escribió como una labor de amor mientras que “miraba a la muerte cara a cara, y con todo, experimentando la gracia suficiente de Dios.”

Ministerio continuado en Kidderminster.

Después de su recuperación, Baxter volvió a Kidderminster y allí se concentró en escribir. “Mis escritos fueron mi ocupación principal diariamente…mientras que la predicación y la preparación para predicar fueron mi recreación” (Reliquiae, MP). Catequizó a los miembros de la iglesia 2 días de cada semana. Iba de casa en casa con un asistente, hablando con cada familia por una hora y proveyendo a cada familia un libro edificante o dos, usualmente libros escritos por él. Dijo de esas visitas: “Pocas familias me despidieron sin algunas lágrimas, o sin lo que parecieron ser unas promesas serias de seguir una vida santa.” También añadió, “Algunas personas ignorantes, que por mucho tiempo no sacaron provecho de la palabra que oyeron, han obtenido más conocimiento y remordimiento de consciencia en media hora de visita intensa, que el que obtuvieron en 10 años de la predicación pública.”

Cito ahora a Packer, “La ciudad abarcaba unos 800 hogares y 2000 personas. Cuando Baxter llegó era ‘un pueblo ignorante, rudo y parrandero’, pero ese estado sufrió una dramática transformación. ‘Cuando emprendí la labor, tomé nota especial de todo aquel que se humilló, se reformó o se convirtió; pero cuando llevaba mucho tiempo trabajando, por la gracia de Dios se convirtieron tantos que ya no tenía tiempo para anotarlos a todos […] familias enteras y un número considerable de personas […] se convirtieron y crecieron en la fe, de manera casi inexplicable.” “La congregación solía estar completa [la iglesia tenía capacidad para 1000 personas], de manera que nos vimos obligados a construir cinco galerías […]. Los domingos […] se podía escuchar a cien familias cantando salmos y repitiendo sermones al pasar por las calles […]; cuando llegué aquí había más o menos una familia por calle que adoraba a Dios y clamaba a su nombre y, cuando me marché, en algunas calles no quedaba ni una sola familia que no lo hiciera; todos, al profesar una piedad seria, nos hacían confiar en su sinceridad”. (Sigue leyendo el resto del párrafo en la página 16).

El tiempo cuando fue expulsado del ministerio

Baxter estaba dispuesto a conformarse en mucho, pero no pudo aceptar todo lo que el rey y los líderes anglicanos exigieron y por eso, como 2000 ministros más, fue expulsado de su iglesia en el día de San Bartolomé (24 agosto) de 1662. Baxter iba rumbo a su cumpleaños 47 cuando eso pasó.

Cuando cumplió 50 años se casó con Margaret Charlton, una mujer que fue convertida mediante su predicación en años anteriores. Ella tenía menos de la mitad de los años de Baxter, y unos cuantos se preocuparon por eso. Sin embargo, la excelencia de su matrimonio silenció los comentarios. Ella tenía la reputación de ser una cristiana devota y una esposa fiel que anhelaba la salvación de las almas. Baxter escribió de ella, hablando de su piedad. Dijo que ella pudo resolver problemas de consciencia mejor que la mayoría de los pastores que conoció. Por eso compartió muchos casos con ella, excepto aquellos más confidenciales.

Fue encarcelado más de una vez. En su vejez, el rey James II le persiguió y fue encarcelado por unos meses.

Además de los sufrimientos por causa de la consciencia, Baxter también sufrió mucho en su salud. Según algunos, Baxter sufría de tuberculosis, pero, si fuera así, aparentemente esa enfermedad no llegó a su colmo porque vivió hasta los 76 años de edad. Desde los 21 años tenía mucho dolor, pero siempre trabajaba ardientemente según las circunstancias le permitieron.

En el tiempo de no poder ser pastor, buscó las maneras posibles de ser útil, especialmente usando su pluma.

Ministerio literario

Publicó como 135 escritos durante su vida; hay como 6 póstumos y muchos tratados no publicados (JP)

Entre los más conocidos: El reposo eternos de los santos (The Saints Everlasting Rest,1650), publicado en español por CLIE (hay copias disponibles todavía a buenos precios); El pastor renovado (The Reformed Pastor, 1656), publicado en español por Estandarte de la Verdad en 2009 (no hay copias disponibles de Estandarte y parece que son escasas porque alguien, via Amazón, el 3 de mayo de 2016, estaba tratando de vender una copia por $140); A Call to the Unconverted (Un llamamiento a los inconversos) (1658); A Christian Directory (Directrices cristianas) (1673). Estos últimos dos están disponibles todavía en inglés en libros o como libros electrónicos.

Muchas partes de los directrices han sido publicados como tratados. Por ejemplo (en inglés): Directions for amusements and recreations; http://www.gracegems.org/28/directions_for_amusements.htm

Hay un buen tratado en español llamado: Cómo pasar el día con Dios

CÓMO PASAR EL DÍA CON DIOS, Richard Baxter

Hay otro llamado: Orientaciones para odiar el pecado Fuente: http://www.puritansermons.com/baxter/baxter16.html
http://descubriendoelevangelio.es/2009/04/orientaciones-para-odiar-el-pecado-richard-baxter/

Lo siguiente5 aparece en “Diarios de avivamientos” (WordPress.com) sin el nombre del autor. Encuentro las citas edificantes:

Extracto de la introducción escrita por el Dr. J.I. Packer

Richard Baxter fue el pastor y evangelista más destacado de la época puritana. Sus logros en el poblado de Kidderminster fueron asombrosos. Inglaterra no había visto ningún ministerio parecido antes. El poblado tenía como 2000 habitantes y la mayoría eran ignorantes, groseros y viciosos. Pero después de la llegada de Baxter, la situación cambió en forma dramática. El dijo: “Le agradó a Dios convertir a muchos… Incluso a familias enteras y en numerosos grupos entraron a la iglesia”. Un siglo después, cuando George Whitefield visitó Kidderminster, escribió a un amigo lo siguiente: “Fui grandemente animado al descubrir que un olor suave de la doctrina, las obras y la disciplina del Señor Baxter, permanecían todavía en ese lugar”.

El libro del Pastor Reformado fue y todavía es, dinamita; y como tal hizo un impacto de inmediato. Muchísimos ministros puritanos (entre ellos presbiterianos, independientes y bautistas) leyeron este libro y lo llevaron a la práctica. El libro hizo un gran impacto sobre muchos ministros en la época del “avivamiento grande” (1742-1743).

Muchos ministros lo han leído como un estímulo que les ha impulsado a entregarse más a la obra de Dios. C. H. Spurgeon comentaba que tenía la costumbre de escuchar la lectura de este libro (a través de su esposa) los domingos por la tarde.

Extractos del libro El Pastor Reformado, publicado originalmente en 1656

Nuestro ministerio debe estar centrado en las grandes enseñanzas de la Escritura. Esto es lo que la gente necesita para alimentar sus almas, para mortificar sus pecados y calentar sus corazones. Si solo predicamos a Cristo, estaremos predicando todo. Esta es la mejor forma para no perder el tiempo. Muchas otras cosas pudieran ser deseables, pero el tiempo es corto y las almas son preciosas. Si los oyentes fallan en comprender las verdades esenciales del evangelio, entonces serán perdidos para siempre. Esto no agradará a aquellos que siempre quieren escuchar algo nuevo y emocionante. Frecuentemente tendremos que repetir las mismas cosas, porque las verdades esenciales son relativamente pocas. Sin embargo, debemos tratar de usar mucha variedad en su presentación. Tenga cuidado de no imitar a aquellos que tratan de compensar su falta de espiritualidad, convirtiendo su predicación en un “show” para divertir a los oyentes.

Nuestra enseñanza debería ser lo más clara y sencilla posible. La gente no puede beneficiarse de nuestro ministerio a menos que lo puedan entender. Si obscurecemos la verdad, entonces somos enemigos de ella.

Debemos cumplir nuestros deberes con gran humildad. Recuerde que la palabra “ministro” significa uno que sirve. El orgullo está fuera de lugar en uno que está buscando ayudar a otros en el camino de la salvación. Si Dios expulsó a un ángel orgulloso del cielo, entonces ¿Acaso dará la bienvenida a un predicador orgulloso y soberbio? El orgullo genera la envidia y los pleitos, y obstaculiza grandemente la obra del evangelio. Algunos pastores se han vuelto incompetentes porque son demasiado soberbios para aprender. No debemos rechazar con arrogancia a aquellos que no están de acuerdo con nosotros. Siempre debemos estar dispuestos a aprender de otros.

Si nuestro pueblo está convencido de que les amamos, entonces serán más receptivos a nuestra enseñanza. Por lo tanto, debemos mostrar nuestro amor en una forma práctica. Pero, hay que tener cuidado de que nuestro amor no sea egoísta. Ellos deben seguir a Cristo y no a nosotros. No pase por alto sus pecados. La reprensión no es inconsistente con el amor. Dios mismo “disciplina a aquellos que ama”. Si usted quiere ser su mejor amigo, ayúdeles a pelear en contra de sus peores enemigos.

Debemos tener reverencia en toda nuestra obra . La reverencia proviene del conocimiento de Dios. Por lo tanto, la irreverencia en las cosas santas es un signo de hipocresía. Alguien que predica como si estuviera viendo el rostro de Dios, tendrá un efecto más profundo que un hombre irreverente, aunque éste predique más ferviente y elocuentemente.

Yo detesto la predicación que busca ser entretenida y alegre. No fuimos enviados para entretener, sino para impresionar a los pecadores con la majestad de nuestro Dios santo. Entre más se manifieste la presencia de Dios en nuestro ministerio, más profundamente será nuestra influencia sobre la gente.

El predicador más dotado no debe gloriarse en nada excepto en la cruz de Cristo. Es un signo seguro de decadencia espiritual cuando perdemos nuestro gusto por la Palabra de Dios.

Debemos estar profundamente conscientes de nuestra insuficiencia y de nuestra completa dependencia de Cristo. Debemos rogar continuamente a Dios por la gracia y la fuerza necesarias para cumplir nuestra gran tarea. No podemos predicar fervientemente a nuestro pueblo a menos que oremos fervientemente por ellos. Solo Dios les puede dar el arrepentimiento y la fe para vida eterna.

Mientras que miramos al pueblo de Dios congregado, debemos recordar que han sido comprados por la sangre de Cristo. Escuche la voz de la sangre (Hebreos 12:24) rogándole para que sea fiel en toda su obra.

Uno de nuestros peores pecados es el orgullo. El orgullo aflige aún a los mejores de nosotros. Afecta nuestra manera de hablar, nuestras compañías y aún nuestra apariencia (la manera como nos vestimos). El orgullo llena la mente con ambición y resentimientos hacia cualquiera que nos estorbe. El orgullo siempre está insinuándose a todos nuestros pensamientos y deseos. Nos persigue aún en nuestros estudios.

Dios quiere que nuestros mensajes sean claros y sencillos para que todos los puedan entender, pero el orgullo nos motiva a ser astutos y divertidos. El orgullo quita el filo de nuestros sermones, porque excluye cualquier cosa que parece sencilla o poco sofisticada. El orgullo nos hace tratar de impresionar a la gente en lugar de edificarla. Dios quiere que prediquemos fervientemente, rogando a los pecadores para que se arrepientan; pero el orgullo nos dice que no debemos ser tan fervientes, para que la gente no vaya a pensar que estamos locos. En esta manera el orgullo gana el control sobre nuestro ministerio. La verdad puede ser predicada pero en una forma que sirve a los intereses de Satanás más que a los de Dios.

Después de que el orgullo ha influido en nuestra preparación, entonces nos perseguirá hasta el púlpito. El orgullo afecta nuestra manera de predicar e impide que digamos cosas ofensivas, aún y cuando sean necesarias. El orgullo nos hace agradar a nuestra audiencia, buscando nuestra propia gloria en lugar de la gloria de Dios. El orgullo tiene la meta de impresionar a la gente con nuestra elocuencia, nuestro conocimiento, sentido del humor, piedad, etc..

Después del sermón el orgullo nos persigue cuando salimos del púlpito, para saber lo que los oyentes piensan de la predicación. Si les agradó, entonces nos regocijamos, pero si no les impresionó, entonces nos desanimamos. Casi no nos preocupamos si tuvo un efecto salvador en algunos oyentes o no.

Algunos ministros están tan ansiosos por ser populares que envidian a sus hermanos más famosos. Parecen pensar que los dones que Dios les ha dado son para atraer la admiración de la gente. Si otros tienen mayores dones que ellos, entonces dicen que se les está “sobrestimando”. ¿Acaso nos hemos olvidado que Cristo nos da dones para beneficiar a toda la iglesia? Si los dones de nuestros hermanos glorifican a Dios y benefician a su pueblo, ¿No deberíamos dar las gracias a Dios?

No obstante, cuán frecuentemente encontramos a los ministros manchando secretamente la reputación de los hermanos más dotados. Cuando no pueden encontrar muchos motivos para criticarlos, entonces se rebajan al nivel de levantar malas sospechas, rumores maliciosos e insinuaciones. Otros, quienes temen perder su popularidad, no permiten que los mejores predicadores ocupen sus púlpitos. Esta actitud es tan común que es raro encontrar a dos predicadores igualmente dotados, trabajando en armonía en la misma iglesia. Su amistad es frecuentemente enfriada por la envidia y la rivalidad. Algunos ministros son tan celosos para mantener su posición que tratan de hacer todo ellos mismos, en lugar de ocupar a un asistente. Esto resulta en que el ministerio sea desacreditado y en el descuido pastoral del pueblo de Dios.

Algunos ministros piensan que siempre tienen la razón, aún en los detalles más pequeños, y critican a cualquiera que se atreve a estar en desacuerdo con ellos. Ellos rechazan la doctrina de la infalibilidad papal, pero parece como si ellos aspirasen a ser pequeños papas. Esperan que todos estén de acuerdo con ellos como si fueran infalibles.5

Rasgos importantes

Su reputación como un hombre santo

Varios hombres de Dios han hablado de Baxter como un hombre santo, como lo hizo Joseph Alleine quien escribió el libro famoso Alarm to the Unconverted, disponible en varios formatos (en inglés).

Muchos hombres conocidos han pasado por alto las ideas no reformadas de Baxter, alabándole por sus escritos prácticos.

Muchos testifican de la ayuda que han recibido de los libros mencionados arriba.

El uso de su tiempo

Considerando la salud de Baxter, es maravilloso observar el uso que hizo de su tiempo, incluyendo la oración, el estudio de las Escrituras, las predicaciones, las visitas pastorales.

Evangelización y cuidado pastoral

Muchas personas se convirtieron por su predicación y sus libros. Algunos de aquellos llegaron a ser ministros del evangelio.

Muchos santos han testificado de cuánta ayuda recibieron mediante diferentes libros del Baxter (como el 2do suegro de Matthew Henry).

Baxter fue un buen pastor y evangelista durante su vida terrenal y no sólo en persona, sino por medio de sus escritos. Todavía tiene una influencia santa entre cristianos de habla inglés y de habla español y portugués y ¿¿?? mediante sus libros.

Notas.

1. La parte sobre Richard Baxter (en inglés) se encuentra también en: https://www.monergism.com/thethreshold/articles/onsite/meetthepuritans/richardbaxter.html
2. Se puede ver en: http://thirdmill.org/newfiles/lyn_friesen/CH.Friesen.Baxter.2.pdf
3. Austin Walker: https://reformedforhisglory.wordpress.com/2013/04/20/benjamin-keach-contra-richard-baxter-justification-contra-baxterianism/ ;
B A Ramsbottom , https://testallthings.com/2008/09/04/ramsbottom-baxterianism-a-warning/ ;
Jeff Massey, http://confessingbaptist.com/tag/baxterianism/
4. Ese error procede de un entendimiento equivocado de Génesis 15:6 citado por Pablo en la Epístola a los Romanos. Ustedes pueden estudiar ese versículo en buenos comentarios sobre Romanos (como los de Haldane, Hodge, Murray).
El pastor Alan Dunn tiene una copia de un buen artículo (en inglés) sobre el significado de Génesis 15:6 en los escritos de Pablo, HOW DID PAUL UNDERSTAND THE SYNTAX OF GENESIS 15:6? Robert Duncan Culver (1916-2015). No pude hallar el artículo en sí con Google, pero hay disponible (por $4) una grabación en MP3 sobre ese tema por el autor: http://www.wordmp3.com/details.aspx?id=19800)
5. https://diariosdeavivamientos.wordpress.com/2014/04/19/richard-baxter-el-pastor-reformado/

Línea de tiempo (véase Introducción de J I Packer, El pastor renovado)

1615 Nació, 12 de noviembre, (¿fecha?) en Rowton, Shropshire
1638 Ordenado diácono
1639 Rector del Colegio Richard Foley en Dudley
1639-40 Coadjutor (ayudante) en la iglesia de Bridgnorth
1641-42 Profesor (coadjutor) en la iglesia de Kidderminster
1642-45 Capellán en Coventry
1645-47 Capellán con regimiento en Whalley
1647-61 Pastor en Kidderminster
1661 Participó en la conferencia de Saboya
1662-91 Tiempo de persecución. Se casó en 1662.
1662-63 Moorfields
1663-69 Acton
1669 Encarcelado por una semana en Clerkenwell
1669-73 Totteridge
1673-85 Bloomsbury
1685-86 Encarcelado por 21 meses en Southwark,
1686-91 Finsbury
1691 Murió, 8 de diciembre, en Londres.

© Copyright | Derechos Reservados